* “Mientras el
trasporte se siga viendo como un botín político no va a haber ningún cambio”:
Ing. Raúl López Domínguez. Primera mitad del siglo XXI seguirá dominada por las
tecnologías de motores convencionales, afirma
México, D. F., a 5 de
mayo de 2015
Hablar de movilidad sustentable puede parecer un tema de
moda, sin embargo, hoy el mundo enfrenta severos daños causados por el cambio
climático y sin duda, el sector trasporte es uno de los mayores contribuyentes
de gases efecto invernadero contribuyendo así al calentamiento global.
Hoy, gracias a los avances en materia de tecnología
automotriz se cuenta ya con opciones sustentables para la implementación de
alternativas en trasporte urbano tales como la utilización de motores
eléctricos o de hidrogeno, con lo que se estaría reduciendo hasta en un 90 por
ciento las emisiones de efecto invernadero. Estas tecnologías cada vez más van
tomando terreno en el mercado automotriz japonés, europeo y estadounidense,
situación que para México se ve aún muy distante.
De acuerdo con el Ingeniero en Transporte, Raúl López
Domínguez, egresado de la Unidad Profesional Interdisciplinaria de Ingeniería y
Ciencias Sociales y Administrativas (UPIICSA), unidad perteneciente al
Instituto Politécnico Nacional, intereses económicos evitan y truncan el acceso
a este tipo de alternativas sustentables, negándole a la población el acceso a
una movilidad sustentable.
“La industria automotriz es una de las más poderosas del
planeta y han gastado millones de dólares y euros en investigación de
tecnologías alternas, sin embargo, el nivel de producción que tienen con
tecnología de combustión es demasiada por lo que la prioridad es sacar esa
producción para luego migrar a las nuevas tecnologías. Existen intereses
económicos que no van a permitir un avance en México”.
El también experto en Dinámica de Sistemas por parte de la
Universidad Politécnica de Cataluña, explica que el proceso de conversión a
sistemas más ecológicos tardara al menos 20 o 30 años en nuestro país puesto
que las plantas armadoras que continúan llegando aún tienen en sus inventarios
motores convencionales que afectan gravemente el medio ambiente.
“El proceso de cambio se va a dar pero va a tardar
precisamente por todos los intereses que se encuentran comprometidos con la
producción ya terminada. A México continúan llegando plantas armadoras de
automóviles, esas plantas van a tener vida útil de 20 a 30 años, entonces, por
lo menos esta primera mitad del siglo XXI continuará dominada por las
tecnologías de motores convencionales”.
Al participar en el 7º Congreso Internacional del Transporte
(CIT) organizado por la Asociación Mexicana de Transporte y Movilidad (AMTM) a
finales de abril, el académico subrayó que el reto que enfrenta la movilidad en
nuestro país va más allá de tecnologías puesto que el trasporte en México sigue
siendo parte de un botín político.
“Mientras en este país no deje de verse al trasporte como un
botín político no va a haber un cambio, desafortunadamente los intereses
políticos han frenado y continuarán frenando el avance en materia de movilidad
y no solo en ese tema. El reto de la movilidad es conciencia por parte de todos
los actores que tienen que ver con el sector; autoridades, académicos,
políticos, la población en general, grupos de interés como son empresarios,
comerciantes, todos”, detalla.
En este sentido, el ingeniero resalta la preocupación por la
fuga de talento que enfrenta el país: “Los egresados de escuelas como el
Instituto Politécnico Nacional, de la UNAM, y de otras universidades públicas
del país cuentan con la capacidad suficiente para competir con egresados de
otros países, prueba de ello es la fuga de cerebros que enfrenta el país. Este
problema no es viejo y continuará vigente mientras en México no haya la
oportunidad laboral que necesitan estos alumnos, la ingeniería mexicana está al
nivel de países como Europa o Estados Unidos, la única diferencia son las
fronteras geográficas y el idioma, pero de nuevo, son los intereses económicos
y políticos que frenan el avance de nuestros jóvenes, es un foco rojo que
requiere de pronta atención”, finaliza. ◄
No hay comentarios:
Publicar un comentario